FINANCIAR LOS BIENES PÚBLICOS COMUNES

La Unión Europea debe actuar con mayor rapidez y eficacia

Partido Democrático Europeo

Es hora de hablar de finanzas. Se plantea una cuestión central: ¿cómo podemos dotar a la Unión Europea de nuevos recursos propios para apoyar nuestras ambiciones colectivas?

Aunque en noviembre de 2022 el Parlamento dio luz verde a la propuesta de la Comisión de introducir un conjunto inicial de tres nuevos recursos propios (un régimen de comercio de derechos de emisión ampliado, un mecanismo de ajuste del carbono en frontera y una participación en los beneficios reasignados de las grandes empresas multinacionales, nosotros vamos más allá.

Estamos convencidos de que, para revitalizar la economía europea, resulta vital reforzar los medios directos de financiación, además de reducir al mismo tiempo su dependencia de las contribuciones nacionales o de los impuestos que gravan a los ciudadanos.

Europa no debe imponerse a los ciudadanos. Por el contrario, son las grandes empresas contaminantes y los gigantes digitales que se benefician del mercado único mientras externalizan sus actividades los que deben ser llamados a alcanzar estos objetivos.

Este planteamiento nos permitirá financiar nuevas infraestructuras y proyectos de investigación, así como las transiciones ecológica y digital, sin imponer una carga excesiva a ningún Estado miembro. La importancia de este planteamiento radica en que ningún Estado miembro puede recaudar fondos de forma aislada. Ante los retos que nos esperan, no se trata simplemente de transferir recursos de un país a otro, sino de conseguir una respuesta colectiva de la Unión. Queremos actuar a escala europea allí donde los Estados individuales no pueden hacerlo eficazmente. Eso es lo que entendemos por subsidiariedad.

Estos nuevos recursos se asignarán específicamente a proyectos en los que la puesta en común de recursos tenga más sentido. Por tanto, nuestra prioridad será apoyar la inteligencia artificial, invertir en la economía del mañana (sobre todo en la digitalización de la industria) y fomentar la investigación sobre las energías renovables y las tecnologías del futuro.

(*) Recursos generados por las contribuciones del Régimen de Comercio de Derechos de Emisión (RCDE), el Mecanismo de Ajuste en la Frontera del Carbono (CBAM) y una parte de los beneficios residuales de las grandes empresas multinacionales.

ACCIONES PRIORITARIAS

RECURSOS PROPIOS

  • Desarrollar la fiscalidad de las empresas para armonizar las bases imponibles del impuesto de sociedades en toda la UE.
  • Introducir la fiscalidad de las criptomonedas, un sector poco regulado que juega con los diferentes regímenes fiscales aplicables entre los Estados miembros.
  • Adoptar un impuesto sobre los gigantes digitales para que todos los actores paguen lo que les corresponde, puesto que en Europa tributan a la mitad que las empresas tradicionales.
  • Garantizar que las grandes empresas multinacionales, especialmente las que tienen un impacto medioambiental significativo, contribuyan proporcionalmente a su huella.
  • Garantizar que estos nuevos recursos se generen de forma justa y transparente.


ACELERACIÓN

  • Prestar apoyo a nuevas infraestructuras y proyectos de investigación, crear puestos de trabajo y reforzar nuestra competitividad global.


TRANSICIÓN VERDE, DIGITAL Y CONOCIMIENTO

  • Destinar una parte importante de los nuevos recursos propios a proyectos relacionados con las energías renovables, la investigación sobre las tecnologías del futuro y la digitalización de la industria, la cultura y Erasmus.



COMPETITIVIDAD

  • Garantizar que la Unión Europea no se encuentre en desventaja competitiva.
  • Fomentar la participación pública en la definición de los proyectos financiados con estos recursos, lo que garantizará un enfoque democrático y transparente.



UNIÓN DE VALORES

  • Reforzar la capacidad de la Unión Europea para financiar directamente a la sociedad civil o a las autoridades locales cuando adopte sanciones financieras por violaciones del Estado de Derecho contra un gobierno de la Unión Europea, promoviendo una condicionalidad presupuestaria inteligente y dando a la Unión Europea la posibilidad de financiación, como propone Renew Europe.
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